Comentarios geopolíticos

 Algunos apuntes sobre la actualidad de estos tiempos tan interesantes y decisivos.

- No hay nada más letal para la economía que la incertidumbre. El primer anuncio sobre subida arancelaria por parte del creador de MAGA, el ínclito magnate llegado a presidente, causó pánico en los parqués. Se aplazó su aplicación. Ahora se ejecuta de un día para otro de manera anticipada. Como consecuencia de ello se desploman las bolsas, aumenta la amenaza inflacionaria en su propio país, se teme por la ralentización de la cadena de suministros de componentes básicos para la industria norteamericana y se contempla la amenaza de un enfriamiento de su economía. Ante lo cual, le ha faltado tiempo a su Secretario de Comercio para matizar esa subida y aclarar que hay margen para negociar y rebajar los aranceles. Lo errático como modus operandi. 

- Europa ha de invertir 800.000 millones en defensa. Por lo cual, sus líderes quedan para cenar en París. Algún cronista muy malvado habló de "la cena de los idiotas", parafraseando la conocida obra de teatro de Francis Veber. Se supone que todo acabaría con un buen digestivo para bajar el condumio, algún licor de hierbas que hiciera más fácil pasar ese difícil trago. Porque el paraguas yanqui se ha cerrado abruptamente. Antes, la amenaza para la vieja Europa venía de los tanques del comunista Pacto de Varsovia. Ahora, el patriarca ortodoxo de Moscú bendice al nuevo zar y su guerra santa contra los decadentes europeos. Ya Atila estuvo a punto de arrasar Roma en el siglo V. La amenaza, otra vez, viene del Este. Habrá que recitar el poema de Kavafis "Esperando a los bárbaros". Los bárbaros, ahora, traen desde la estepa ojivas nucleares. 

- El magnate de los casinos convertido en presidente se ha amigado con el aliado ruso de los ayatolás y del simpático gordito de Corea del Norte; este último, también protegido de China. Esto es como un sudoku. Japón, desde el final de la Segunda Guerra Mundial tiene limitado su gasto de defensa. Al igual que Corea del Sur. Su protección militar ante la potencial amenaza de chinos y norcoreanos corre a cargo de EEUU. ¿Cerrará también allí el paraguas el "prudente y discreto" presidente americano para centrarse solo en América y allá se las entienda cada cual?

- Adiós a la legalidad internacional. El marco jurídico que reguló las relaciones interestatales desde el final de la Segunda Guerra Mundial salta por los aires. Ahora primará la ley de la selva y el más fuerte podrá ejercer una política de hechos consumados. Si Rusia se adueña de territorio ucraniano rompiendo con el derecho internacional, ¿qué puede impedir a China quedarse con Taiwán? Volvemos al siglo XIX. Quizá, a partir de ahora, queden para jugar al parchís de vez en cuando el dueño de los casinos, el zar y el mandatario chino para organizar la geopolítica y repartirse el pastel.

- Una curiosidad: aquí, en nuestro país, quien se arroga el papel de máximo defensor de los intereses del campo, del agro, el guardián de las esencias, el patriota por antonomasia, apoya sin fisuras a quien con sus aranceles perjudicará a ese mismo campo, y a su agricultura, que tanto dice poner en valor. Vivir para ver. 

(Continuará)

(Texto: Mariano López-Acosta)